| Ediciones anteriores | sala de prensa | versión PDF | Portal Unicamp | Suscríbete a JU | Edición 353 - 26 de marzo al 8 de abril de 2007
Lea este número
Cubrir
Cartas
trayectoria FCM
Calidad del combustible
Violencia
Escombros reciclados
Desinfección vegetal
Reutilización del agua
champús
Panel de la semana
Tesis
Unicamp en los medios
Libro de la semana
Sitio web de la Unicamp
cultura evangélica
Accidentes de trabajo
 

8



Se utilizan escombros reciclados.
en pavimentación de calles

El empresario José Wilson Vedroni en la planta de reciclaje de Vinhedo: los residuos pasan por una trituradora, son tamizados y separados por categorías (Fotos: Antoninho Perri)O El empresario José Wilson Vedroni puso en práctica una solución relativamente sencilla, pero que nadie había probado aún. A partir de la consultoría que brindó, surgió la idea de utilizar residuos generados por la construcción civil para pavimentar calles y cerrar zanjas en la ciudad de Piracicaba, en São Paulo. El proceso fue tan exitoso que otra administración pública decidió importar la idea e implementar el mismo sistema en Vinhedo. Además de ofrecer un destino seguro para los escombros de construcción y demolición, la solución abarata los trámites normalmente costosos realizados por los ayuntamientos.

Solución lo hace más barato proceso antieconómico

Según cálculos de Vedroni, que presentó una tesis de maestría sobre el tema en la Facultad de Ingeniería Agrícola (Feagri), una ciudad como Campinas, por ejemplo, podría ahorrar, en promedio, alrededor de 4,5 millones de reales al año reciclando residuos de demolición. , procedentes de reformas de viviendas y zonas comerciales e industriales, utilizándolos en pavimentación. La única inversión, en este caso, sería la implantación de plantas de reciclaje, cuyo coste compensaría el beneficio que la iniciativa supondría para las administraciones públicas y el medio ambiente.

Trabajadores de la alcaldía de Vinhedo cierran zanja con residuos reciclados: destino seguroEl proceso consiste básicamente en recoger los residuos y enviarlos a una unidad de clasificación y reciclaje. Vedroni explica que el porcentaje de utilización de este material es del 80%. Después de la separación, el residuo pasa a través de una trituradora de impacto y luego se tamiza y se separa en las categorías "grande" y "fina". A continuación se realizan ensayos geotécnicos y análisis químicos para comprobar la presencia de sustancias contaminantes. Tras estos procedimientos el material estará listo para ser utilizado en pavimentaciones y en obras que no requieran soportes complejos. Por tanto, el objetivo es utilizarlo por empresas de agua y alcantarillado que frecuentemente necesitan abrir y cerrar zanjas para reparar tuberías. Para los análisis químicos, Vedroni formó alianzas con el Instituto de Química de la Unicamp.

Escombros - Vedroni tiene especialización en el área ambiental y para su maestría fue supervisado por el profesor David de Carvalho. Su principal preocupación fue con la cantidad de residuos que se generan en el país y su disposición en vertederos, vertederos y zonas inadecuadas. Estimaciones del IBGE indican que cada habitante generaría, en promedio, 0,51 toneladas de residuos de construcción y demolición por año. Esto significa que el volumen generado en Brasil sumaría alrededor de 92 millones de toneladas/año. Esta cantidad se considera extremadamente alta. Además, su eliminación no está controlada.

Según el experto, la resolución del Consejo de Medio Ambiente (Conama), número 307, emitida en julio de 2002, prevé la responsabilidad del municipio en el proceso de elaboración del plan de manejo de estos residuos, incentivando el reciclaje y la creación de vertederos de residuos inertes. . Son notorios los impactos negativos sobre el medio ambiente y la salud de la población en relación a la no gestión. “Degrada la apariencia visual de las ciudades, provocando inundaciones al obstruir las tuberías de agua de lluvia y sedimentando ríos y arroyos”, argumenta.

Otra cuestión destacada por el investigador en el trabajo es la creciente escasez de áreas para la creación de vertederos específicos en ciudades de más de 150 mil habitantes. La ciudad de São Paulo, por ejemplo, ya no tiene espacio para crear este tipo de área. En este sentido, la propuesta sería sumamente apropiada, ya que evitaría altas inversiones en transporte y otros servicios para procedimientos de eliminación adecuados en otras regiones. “Los residuos se generan a diario y es necesario realizar un mantenimiento periódico de las acequias. Esto crea un círculo vicioso que culmina en vertederos, que son perfectamente innecesarios”, explica el creador del proyecto.

El inicio - Hace unos tres años, la ciudad de Piracicaba tuvo un problema grave, común en otras ciudades. Los agujeros abiertos y cerrados por las empresas de agua y alcantarillado, al cabo de cierto tiempo, acabaron cediendo. El mantenimiento debía realizarse con frecuencia, generando pérdidas para el Ayuntamiento. Al pedirle asesoramiento, Vedroni se encontró con una planta de reciclaje de residuos de construcción y demolición que estaba parada e inservible en el municipio. Luego ideó un sistema para reutilizar los residuos generados en la ciudad. La experiencia fue exitosa y se exportó para Vinhedo.

En Campinas, Vedroni hizo cálculos de los escombros generados. Se alcanzó la marca de 540 mil toneladas por año, lo que correspondería a 130 mil cubos. Aunque la ciudad cuenta con una planta de reciclaje, esta no gestiona el 40% de lo que se genera. Según el investigador, se necesitarían tres plantas más del mismo tamaño.

SALA DE PRENSA - � 1994-2007 Universidad Estadual de Campinas / Oficina de Prensa
E-mail: prensa@unicamp.br - Ciudad Universitaria "Zeferino Vaz" Barão Geraldo - Campinas - SP